Nuestro proyecto de movilidad para el curso 23/24 sigue adelante en el desarrollo de estancias formativas del alumnado y profesorado en distintos países de Europa con el propósito de alcanzar los objetivos de nuestro proyecto de acreditación Erasmus relacionados con el desarrollo de nuestra identidad europea, las metodologías activas, la sensibilidad medioambiental, la mejora de la competencia comunicativa en Inglés y la integración del alumnado desfavorecido.
Si el pasado sábado eran nuestros alumnos de sexto los que regresaban a casa tras una semana en Oradea (Rumanía) llena de aprendizajes, experiencias y vivencias, me toca ahora a mí completar un pequeño capítulo del libro Erasmus de nuestro colegio en esta preciosa ciudad Croata de 35.000 habitantes patrimonio de la humanidad que vio nacer al genio de Sibenik. ¿Sabes a quién me estoy refiriendo? Sibenik es famosa por su catedral, por sus parajes naturales, por sus playas, por su recintos amurallados, pero también por ser la ciudad donde nació uno de los más grandes jugadores europeos de baloncesto de todos los tiempos; me refiero al mítico Drazen Petrovic. Traigo a colación aquí uno de mis post en este blog que recuerda su controvertida figura. https://peuropeosrodriguezcruz.blogspot.com/2019/11/lo-que-el-baloncesto-y-erasmus-ha-unido.html
Obviando el largo y tedioso viaje desde Villafranca hasta Madrid en bus (5 horas y media) y un pequeño retraso en el aeropuerto, todo fue según lo previsto y a las 21:00 h. ya me encontraba instalado en mi apartamento deshaciendo la maleta y preparando mi oficina y los regalitos que he traído desde España para las profesoras croatas. Apartamento acogedor, cómodo, confortable y bien situado que reúne todo lo necesario para mi estancia en Sibenik. Está chispeando y es ya de noche, decido quedarme en el apartamento, darme una ducha e irme pronto a la cama; estoy cansado, habrá tiempo los próximos día para patear la ciudad.
Amanece pronto en Sibenik. Los rayos de sol comienzan a colarse por las ventanas a eso de las 5:30 h, si bien aguanto en la cama hasta las 7:00 h. He dormido bien, aunque los nervios, la expectación y la incertidumbre que me genera cada acción de enseñanza que emprendo en el extranjero, me hacen mantenerme siempre alerta y no bajar la guardia para intentar estar siempre a la altura de las circunstancias. Enseñar, sin desmerecer otro tipo de acciones, y aunque Inma se ría, no es lo mismo que realizar un curso o un periodo de observación; quizá sea ese el motivo por el que apenas un 2% del profesorado de nuestro país solicita este tipo de acción formativa.
He quedado con Antonija a las 8:30 h en el parking del apartamento. Tras varios años de videoconferencias y decenas de correos por fin tendré la oportunidad de conocerla personalmente. Estuvimos trabajando juntos en nuestro anterior proyecto Erasmus "Values through art" y desde el principio, siempre mantuvimos una muy buena sintonía tanto con ella como con Zeljka. Me recibe con un afectuoso abrazo, siento el calor de su bienvenida, nos alegramos mucho de vernos. Les hago entrega de unos pequeños regalos traídos desde España, lo cual desprendo les gusta y me agradece mucho.
Cruzamos la ciudad para dirigirnos a la escuela, la primera escuela católica creada en Croacia. Fundada en 2007, tiene alrededor de 310 alumnos, alberga el primer ciclo de la ESO y no tiene etapa de Educación Infantil. Tras conocer a la directora, Sister Madica, una monja todoterreno alegre y jovial, y hacerle entrega de un pequeño detalle traído desde España, realizamos un breve recorrido por las clases, instalaciones y distintas dependencias del centro.
Posteriormente, asisto en la sala de profesores a un par de amenas presentaciones impartidas por profesoras del colegio sobre la historia del colegio, los proyectos e iniciativas en los que están inmersos, y el tratamiento que otorgan a la actividad física y al deporte. Entre sesión y sesión aparece en la sala de profesores Zeljka, la otra profesora croata con la que había estado trabajando en el proyecto "Values through art", a la cual me alegro mucho de saludar y conocer personalmente tras haber estado trabajando durante mucho tiempo en la distancia. Nos comunicamos en Inglés, el acento y la pronunciación de las profesoras croatas me facilita las cosas, e incluso una de ellas llega a decirme que tengo una muy buena pronunciación, lo cual me halaga enormemente. Cumplido o no, parece que las clases de Enrique en el CPR de Almendralejo, las conversaciones con mis compañeros y las continuas audiciones van ablandando algo mi duro oído. Little by little...
Acto seguido me pongo en faena, pasamos por el cuarto de material, cogemos unas cuerdas, unos aros y unos balones y nos dirigimos a las pistas polideportivas donde impartiré las sesiones de Educación Física con el permiso de Ive, mi colega de Educación Física; lógicamente en Inglés. Las pistas parecen de nueva construcción, el firme está en muy buen estado, se encuentran valladas, las líneas muy bien pintadas y tienen un pequeño graderío e iluminación para poder ser utilizadas de noche. Antonija me dice que está prevista la construcción de un nuevo gimnasio junto a las pistas polideportivas, pero que de momento es solo un proyecto.
Clases con los grupos de 3B, 6A y 6B configuran el programa para la segunda mitad de la mañana. Es curioso comprobar el poder motivador de la actividad física. En todos los países en los que he tenido oportunidad de dar clases, he sentido la especial motivación de los alumnos por la mejor asignatura de la escuela. Tanto Antonija como yo coincidimos en la conveniencia de introducir un periodo diario de EF al día. A los chicos del grupo 6 les cuesta un poco más activarse, pero consigo engancharles en la sesión con unos juegos de iniciación deportiva que son de su agrado, a tenor de su implicación en la actividad. Los chicos del grupo 3 disfrutan enormemente de los juegos que les planteo. Terminamos las sesiones al igual que en España con nuestro grito de guerra "I love Physical Education lesson". Chicos disciplinados, educados, obedientes y llenos de energía que hacen caso a mis indicaciones y disfrutan con la actividad física y el deporte. Muchos de ellos me preguntan "¿Real o Barca?", y yo les contesto "Athletic Club de Bilbao". Es curioso, alguno de ellos conoce a los hermanos Williams. Y como no, es inevitable que salga a colación el gran ídolo croata Luka Modric o Ivan Rakitic. Me dice Antonija que en los 80 el deporte de moda era el baloncesto, pero que ahora los chicos están obsesionados con el fútbol. Entre clase y clase conozco a un chico de pelo rubio de 10 años con el que mantengo una pequeña conversación; me dice que entrena a diario a waterpolo y me recuerda la final del pasado Campeonato de Europa en la que Croacia perdió ante España. Le digo que quizá algún día le veamos compitiendo con la selección Croata, que tiene que trabajar muy duro para conseguirlo; me mira y se sonríe.
Finalizadas las clases, como con Antonija e Ive en el amplio comedor del colegio junto a los alumnos un rico puré de patatas con estofado de carne y ensalada de lechuga. Hablamos sobre nuestros colegios, las diferencias de los grados universitarios y de la excursión a un parque natural prevista para mañana si el tiempo acompaña. La previsión meteorológica pone lluvias intensas para mañana en forma de tormenta; echaremos paraguas y chubasquero. Ive me lleva en coche hasta mi apartamento. El colegio está situado a las afueras de Sibenik. Por la tarde he quedado con Antonija para enseñarme la ciudad. Descanso un poco y empiezo a dar forma a la entrada de hoy en mi blog.
La tarde promete. Cielo algo nublado y temperatura muy agradable para pasear. Nos adentramos por las estrechas y encantadoras calles del centro histórico llenas de tiendas, bares y restaurantes, hasta la majestuosa Catedral de Saint James, declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Visitamos la Catedral por dentro a la par que la luz que entra por sus preciosas vidrieras torna de un color morado su cúpula. Antonija me dice que sus hijos fueron bautizados en ella y que se siente muy orgullosa de este monumento emblema de la ciudad que atrae a miles de turistas cada año. Acto seguido damos un paseo por la marina hasta un lugar elevado con preciosas vistas desde donde se puede ver la ciudad coronada por el Fuerte de San Nicolás. Tomamos un café y charlamos animadamente, como no, sobre Erasmus, pero también sobre nuestras familias, nuestros hijos, lo elevado de los precios en Croacia y la influencia del turismo en la ciudad entre otros temas. Empieza a refrescar, volvemos nuevamente por la marina mientras observo el encanto de los barcos amarrados y los edificios antiguos. Llegamos a la Plaza Principal donde me despido de Antonija hasta mañana, no sin antes agradecerle su atención conmigo y su agradable compañía y conversación.
Muchas gracias a todos los profesores y profesoras del colegio por vuestro cálido recibimiento. Me he sentido muy a gusto y cómodo en todo momento; espero aprender mucho de todos vosotros esta semana y dejar mi humilde granito de arena en vuestro centro.
Erasmus en estado puro.
Espero todo bien por el cole
Un abrazo desde Sibenik.
