CEIP JOSÉ RODRÍGUEZ CRUZ

sábado, 25 de mayo de 2024

SMALL DIARY ABOUT MY STAY IN SIBENIK: 24/5/2024

Último día en Sibenik. Me levanto con sueño, ayer me cogió el toro subiendo la entrada al blog y con labores de difusión, si bien no es una cuestión que me preocupe; no he venido a Sibenik a dormir, ya habrá tiempo para descansar. Desde mi punto de vista, la difusión es una parte muy importante de la experiencia que todo docente que realice una movilidad Erasmus debería cuidar. Particularmente, dedico diariamente un tiempo precioso a este cometido con el objetivo de hacer partícipe de mi experiencia a toda la comunidad educativa casi en tiempo real. Podría limitarme a subir posts vanos en redes sociales, como hacen muchos, sin contenido alguno con imágenes delante de la fachada de una catedral o de un colegio, pero me estaría engañando a mí mismo y estaría haciendo un flaco favor a la continuidad del programa Erasmus en mi colegio. No entiendo la difusión Erasmus sin compartir mis temores, mis inquietudes, mis aprendizajes, mis sensaciones, vivencias o experiencias en cada uno de los lugares que visito; y Sibenik no podía ser menos. Que mis colegas croatas lean con entusiasmo mi diario en el blog me enorgullece. Recibir correos de mis alumnos y mensajes de afecto y cariño de compañeros y padres que me siguen a diario, es mi mayor satisfacción. Por todo esto y mucho más, merece la pena seguir alimentando este humilde blog.

7:50 h. Puntual a la cita, me recoge en el lugar acordado Kolinda, profesora de Inglés que habla un poco de español. Me dice que ella entiende el castellano mejor que lo habla y que lo aprendió de forma autodidacta viendo telenovelas; motivo por el cual  su acento es algo latino. Kolinda es una de las organizadoras de la actividad de hoy en el marco del proyecto "Native speakers project", en la cual tengo el gusto de participar junto a tres chicos españoles que se encuentran en Sibenik realizando un voluntariado. 

El enorme recibidor de entrada al colegio luce engalanado para recibir a los invitados de distintos países de Europa que intercambiarán información con los alumnos de grado 7 y 8. Cada país tiene un stand en el recibidor que los alumnos, divididos en grupos, han adornado días antes con banderas, libros, imágenes, instrumentos, magnets, camisetas y elementos políticos, económicos o deportivos significativos de cada país. La actividad consiste básicamente en que los nativos trasladen información relevante de su país a los alumnos, que luego tendrán que exponer al resto en Inglés en el salón de actos. 





En el centro del recibidor, café, zumos y dulces típicos para todos los participantes y un stand del país anfitrión con la camiseta de Luka Modric por bandera. Para dar la bienvenida a los presentes e inaugurar la actividad, qué mejor que una bonita canción de "Klapa" interpretada por alumnos del colegio. Los chicos empastan su voces de forma magistral y la canción suena "super", como dicen aquí. 




Finalizada la primera parte de la actividad, ya en el salón de actos del colegio, los chicos suben al escenario y presentan a sus compañeros lo aprendido en Inglés. Escucho sus presentaciones y tomo notas en mi cuaderno para la entrada de hoy en el blog sentado en una de las cómodas butacas del bonito y acogedor salón de actos del colegio. El nivel de Inglés de los alumnos es muy bueno; la mayoría de ellos se comunica con fluidez utilizando los tiempos verbales de forma correcta y un vocabulario rico y variado que ya lo quisiera yo para mí. Interesante actividad que requiere de toda la comunidad educativa para su organización y que de forma interdisciplinar trabaja aspectos lingüísticos, sociales y culturales de una Europa rica y diversa.




Clases con los grupos de 4A y 3B configuran las segunda parte de la jornada. El calor aprieta en la pista, pero los chicos disfrutan de lo lindo con las actividades que les planteo. A estos no hay que activarles, ya vienen con las pilas puestas de fábrica; nada que ver con los adolescentes. Siguen la dinámica de la clase con normalidad y muestran una actitud y un comportamiento excelente. Todo sale perfecto, salvo una alumna de Antonija que lamentablemente sufre un accidente fortuito y alguna pequeña discusión provocada por el fragor de la batalla. Es mi última clase en Escuela Católica Primaria de Sibenik . Me despido de los chicos hasta siempre, agradeciéndole la oportunidad que me han brindado y recordándoles que no olviden nunca cuál es la clase más importante de la escuela. 

Me alegra comprobar la pasión por el deporte de los alumnos que se vive en la escuela, muchos de ellos practican deporte de forma regular en sus clubs y eso se nota en sus capacidades físicas y coordinativas, pero tengo la sensación que esa afición deportiva traspasa las barreras de esta ciudad para convertirse en un sentimiento de identidad y pertenencia nacional del que los croatas se sienten muy orgullosos; no hay más que ver la admiración que profesan a sus estrellas deportivas. Un país con poco más de 30 años de historia necesita referentes que pongan a Croacia en el  mapa. Croacia está de moda en Europa, como lo está el cantante que representó a este país en el pasado Festival de Eurovisión. Me dice Antonija que miles de personas fueron a recibirle al aeropuerto como si de un héroe nacional se tratara; obtuvo un segundo puesto, pero para ellos es toda una victoria que celebran a diario cantando su canción. Una canción que representa el orgullo patrio de los croatas.





El despacho de Sister Mandica acoge la entrega de certificados y evaluación de la visita con halagos y agradecimientos mutuos y su invitación a dejar unas palabras en el libro de visitas del colegio; todo un honor para mí. Tanto Sister Mandica, como Antonija y Zeljka, me hacen entrega de varios regalos, entre ellos una botella de aceite del olivar del colegio y una camiseta del Club de Baloncesto de Drazen Petrovic que me hacen mucha ilusión. Hablamos sobre la posibilidad de que nuestras escuelas vuelvan a trabajar juntas en un proyecto Erasmus y nos citamos para vernos muy pronto en España; sería un placer retomar la colaboración con una escuela amiga, trabajadora, cumplidora y fiable.   



Terminada ya la jornada lectiva, tras la comida en el comedor, Antonija me enseña la capilla y el olivar del colegio (una plantación de 170 olivos que produce un aceite exquisito galardonado a nivel mundial) y me despido de Marco, el conserje/jardinero del colegio; persona muy trabajadora, amable y servicial que vive para el colegio, según me cuenta Antonija. Marco fue la primera persona que me presentó Antonija el primer día que pisé la escuela y Marco es la última persona de la que me despido antes de inmortalizar mi paso por la escuela con una foto en su fachada junto a Antonija.



Ya por la tarde, visito con Antonija y su familia, un pequeño y bonito pueblo de pescadores. El sol comienza a caer y los últimos rayos de sol se reflejan en las cristalinas aguas del Adriático mientras damos un paseo contemplando las preciosas vistas. Antonija y su marido me llevan a cenar a "Konoba Roko", un pintoresco bar/restaurante donde se reunían los pescadores y los lugareños para charlar, beber y cantar, decorado con estilo marinero que desde hace varias generaciones ofrece en la carta el pescado capturado por ellos mismos. "Konoba" es como se llama aquí a este tipo de tabernas pequeñas en las que más que la estética, lo que prima es el producto fresco y la buena compañía. De fondo, canciones tradicionales croatas amenizan la cena. Muchas gracias Antonija y Zarko por vuestro tiempo y generosidad.






Finalizo aquí la redacción de este pequeño diario no sin antes mostrar mi agradecimiento a todos lo que han hecho posible que haya tenido la oportunidad de vivir esta fantástica experiencia en Sibenik. Mi especial agradecimiento a Antonija y Zeljka por la excelente organización del programa, por su cercanía, simpatía, amabilidad y generosidad sincera y a todos los profesores que, de una u otra forma me han dedicado parte de su tiempo durante esta semana. Muchas gracias Ive, Ivana, Ines y Kolinda por vuestro trato siempre cercano y afectuoso. Y como no, gracias Sister Mandica; he sentido su presencia y cercanía en todo momento. Podría parecer un tópico o sonar a cumplido, pero no es así, en el corazón me llevo un trocito de Sibenik, de vuestra escuela y de cada uno de vosotros. Mi enorme agradecimiento por haberme dado la oportunidad de sentirme miembro de vuestra comunidad educativa. 

Mi felicitación a toda la comunidad educativa de Escuela Católica Primaria de Sibenik por su excelente trabajo en la formación integral de sus alumnos y alumnas. En mi retina quedará marcado para siempre un colegio vivo, joven y dinámico, de chicos alegres, educados, disciplinados y respetuosos y de profesores competentes comprometidos con su mejora.

Gracias, como no, a mis compañeros del Grupo de Trabajo Erasmus en el cole por trabajar de forma entusiasta en la internacionalización de nuestro centro. Gracias a todos los compañeros de mi Colegio que han sustituido mi ausencia esta semana y disculpas a mis alumnos por haberles privado de la "mejor clase de la escuela"; ellos saben bien porqué lo digo. Gracias a alumnos, amigos, compañeros y familiares por vuestras muestras de cariño y por vuestros comentarios en el blog. Y por último, gracias a mi familia, sin su apoyo, ayuda y comprensión, nada de esto sería posible.

No sé cuándo volveré a abrir un nuevo capítulo de este "pequeño" diario, pero si de algo estoy convencido es que no será el último. Un placer compartir este diario con todos vosotros y haceros partícipes de mis experiencias, temores y alegrías. Mil gracias por seguirme tan de cerca. No olvides dejar tu comentario en el blog!

Erasmus en estado puro.

Espero todo bien por el cole.

Un abrazo desde Sibenik.

jueves, 23 de mayo de 2024

SMALL DIARY ABOUT MY STAY IN SIBENIK: 23/5/2024

Esto avanza. Casi sin darme cuenta me encuentro ya en la recta final de esta aventura Erasmus. Son varias ya las estancias formativas que, en forma de enseñanza, he realizado en distintos países de Europa y, en todas ellas, he intentado exprimir al máximo la experiencia integrándome en cada escuela que he visitado, aprendiendo con humildad de profesores y alumnos y aportando mi pequeño granito de arena en su comunidad educativa. Desde mi punto de vista, esto es lo que hace especial a las acciones de enseñanza y las distingue de la realización de un periodo de observación o un simple curso. 

No quiero desmerecer con esto ni infravalorar a aquellos que se decantan por este tipo de acciones formativas, los cuales merecen todo mi respeto y reconocimiento, pero las cifras hablan por sí mismas. Cuando apenas el uno por ciento de las solicitudes de movilidad Erasmus en nuestro país solicitan este tipo de acción, por algo será. Y es que realizar enseñanza no es "moco de pavo"; es un tipo de actividad que supone dejar abiertas las tripas de tu proceder didáctico a los ojos de alumnos y profesores desconocidos en un intento de alcanzar su aprobación y dejar en ellos tu impronta personal y profesional en tan solo unos días. Desde mi humilde opinión, supone adoptar un rol activo de enseñante en un centro totalmente distinto al tuyo a miles de kilómetros de tu localidad que te permite poner en práctica tu competencia comunicativa y contrastar tu metodología docente, sintiéndote por unos días parte viva de otra comunidad educativa, estableciendo contactos fiables sobre los que cimentar futuros proyectos de cooperación; por todo esto y mucho más, desde mi punto de vista, realizar enseñanza es otra historia.

No puedo negar que las acciones de enseñanza me generan mucha incertidumbre por la necesidad de estar siempre a la altura de las circunstancias, pero lo cierto es, que cada vez me siento más seguro y confiado. La experiencia por supuesto es un grado, pero también la mejora en mi nivel de Inglés hace que cada vez me sienta más cómodo y seguro para comunicarme con profesores y alumnos sin miedo a mantener conversaciones o resolver cualquier cuestión o incidencia que pueda surgir durante la movilidad. Si a todo esto, le sumamos la extraordinaria atención y acogida que todos en Katolička osnovna škola Šibenik me están brindando, todo es mucho más fácil.

La mañana comienza como de costumbre con dos breves pero interesantes presentaciones sobre el sistema educativo Croata y sobre los proyectos interdisciplinares que tienen en marcha a cargo de Sister Mandica, Ivana y Ana. Me gusta mucho este formato de presentaciones breves de apenas 15-20 minutos sobre diversas cuestiones, pues me permiten mantener la atención sin distracciones, tomar notas y retener casi toda la información. Por ejemplo, me llama la atención que dividen el curso escolar en dos cuatrimestres y que, a parte de las calificaciones académicas, que van del 5 al 1, siendo 5 la mejor nota, ofrecen también una calificación que valora el comportamiento y la actitud. Por su parte Ana, me explica la importancia que otorgan a la realización de actividades interdisciplinares al aire libre.



Clases con los grupos de 3A, 8A y 6A configuran el programa para la segunda mitad de la mañana. Ivana, la profesora del grupo de 3A, recibió ayer la visita del inspector para ser observada en su desempeño docente a efectos de conseguir un nivel más avanzado en cuanto a estatus y remuneración dentro de los distintos niveles de la carrera profesional docente. El resultado fue muy positivo, por lo que hoy lucía pletórica y relajada. Durante la sesión, bajo un sol radiante, hacemos presentaciones, establecemos normas y nos ponemos en faena. Los chicos disfrutan de la sesión y yo con ellos, se muestran muy motivados y con excelente actitud; así da gusto. Ivana hace las veces de traductora en ciertos momentos y hace fotos. Todo sale perfecto. Termino muy satisfecho.



Clase con el grupo de 8A. Son los mayores de la escuela, chicos de 14 años grandes como castillos que me sacan una cabeza algunos de ellos. De toda la clase, debido a lesiones o enfermedad, tan solo están disponibles para hacer Educación Física 6 alumnos, por lo que me veo obligado a cambiar sobre la marcha la sesión prevista. Como buenos adolescentes, les cuesta activarse. Prolongo el calentamiento con algunos juegos de activación y les enseño a jugar a Datchtball. Ive, mi colega croata y yo participamos activamente en el juego, el cual logra enganchar a los alumnos y mantenerles muy motivados. Al finalizar la sesión, mi colega croata me habla sobre un juego de similares características llamado "Border game" que causa furor en Croacia y que a los chicos les encanta. Me explica las reglas y tomo nota.

Clase con 6A. La última sesión de la mañana, transcurre con normalidad, si bien es un grupo numeroso con algunos chicos a los que les cuesta mantener la atención, por lo que tengo que emplear más energía en hacerme entender y mantener el control. Por lo general, son chicos bien coordinados, muchos de ellos practican deporte y eso se nota. Ive, me propone dedicar los últimos minutos de la clase a jugar al "Border game" para que vea la dinámica del juego, lo cual me parece perfecto y agradezco. Antes, les enseño un juego de iniciación deportiva que les gusta mucho y al que jugamos varias partidas. Muchas gracias Ive por permitirme enseñar a tus alumnos y por enseñarme varios juegos que pondré en práctica en mi colegio con mis alumnos. En definitiva, esta es la esencia de Erasmus, intercambiar conocimiento y aprender de los demás. 

La tarde se presenta apasionante con varias citas previstas en la agenda para seguir descubriendo la ciudad y su precioso entorno natural. Antonija y Zeljka me llevan a conocer la isla de Krapanj, la isla habitada más pequeña de Croacia con menor altura sobre el nivel del mar famosa por sus esponjas naturales. Paseamos por sus estrechas calles, visitamos su Iglesia y entramos en una pequeña tienda donde nos cuentan con detalle el proceder de antaño para coger esponjas del fondo del mar y nos muestran los pesados trajes que empleaban para sumergirse. 










Siguiente parada, Canal de San Antonio y fuerte de San Nicolás, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Si imponente es el fortín construido por los venecianos para defender la única entrada a la ciudad en el s. XVI, el camino de madera que cruza el Canal de San Antonio hasta el Fuerte, no es menos bello. Dicho camino separa literalmente el Mar Adriático del río Krka y realizar su recorrido pisando las baldas de madera hasta el Fuerte es toda una maravilla para los sentidos.








De vuelta a la ciudad, hacemos la última parada en el pabellón donde entrena el club de baloncesto fundado en memoria de Drazen Petrovic. Con los colores de la ciudad en la equipación, negro y naranja, un grupo de chicos y chicas entrena el bote, el cambio de manos y la entrada a canasta. Durante la conversación, tanto Antonija como Zeljka y el entrenador, se refieren a Petrovic por su nombre con un grado de cercanía que evidencia lo orgullosos que se sienten de él, de lo que representó para su cuidad y su país, y del legado que les dejó. Me despido del entrenador deseándole muchos éxitos deportivos, quien me regala un llavero de su club con la efigie del genio de Sibenik que me hace mucha ilusión.


Con el llavero en el bolsillo, me despido de Antonija y Zeljka agradeciéndoles su agradable compañía, el tiempo que me han dedicado y todo lo que me han enseñado. Gracias de corazón! La tarde no ha podido ser mejor.

miércoles, 22 de mayo de 2024

SMALL DIARY ABOUT MY STAY IN SIBENIK: 22/5/2024

Inicio una nueva jornada en Sibenik, siempre expectante por saber lo que me deparará esta preciosa ciudad de la costa Dálmata. Como todos los días me levanto muy temprano, no consigo aguantar en la cama más allá de las 6:30 h. Los rayos de sol que se cuelan por una de las ventanas hacen la veces de despertador natural. La mañana luce espléndida, algo fresquita tras el chaparrón de esta noche, pero con un sol radiante. Salgo a comprar unos dulces para desayunar en una panadería cercana y regreso al apartamento; me gusta desayunar en su pequeña y coqueta terraza contemplando el Fuerte de San Miguel, uno de los cuatro que posee la ciudad.

Ya en la escuela, durante la primera hora asisto a dos interesantes presentaciones sobre Croacia. La primera de ellas, a cargo de dos profesoras del colegio, Ines y Julija, sitúa a Croacia en el mapa y me muestra sus principales características demográficas, físicas y políticas. Durante la presentación, Ines y Julija, vuelven a poner sobre la mesa el problema del sector primario, la carestía de la vida y los pobres salarios que reciben. El sueldo de un profesor medio en Croacia ronda los 1.300€, lo que hace que, aun cobrando su salario en verano, muchos de ellos se vean obligados a buscar otro trabajo durante las vacaciones estivales debido a la alta inflación del país motivada por el turismo, la guerra en Ucrania y la entrada en el euro. Es difícil entender cómo los trabajadores de la enseñanza que tienen la enorme responsabilidad de formar a las generaciones futuras cobran lo mismo que un reponedor de supermercado. Me dicen que el gobierno es conocedor de esta situación, pero lo cierto es que los sueldos no dan para más y cada vez hay más gente que sale fuera del país a buscar una vida mejor mientras importan mano de obra del sudeste asiático. 



Acto seguido, Antonija y Zeljka, me presentan interesantes hechos históricos, culturales y deportivos de Croacia y, en concreto, de la ciudad de Sibenik, haciendo hincapié en sus importantes festivales, entre los que cabe destacar el Festival de los Niños, el Festival de las Luces, los conciertos estivales en el Fuerte de San Miguel o el más importante Festival de "Klapa" de Croacia que se celebra cada año en la plaza de la Catedral de Santiago. "Klapa" es el nombre que recibe un estilo de canto tradicional a capella de la región de Dalmacia. Uno de lo más populares ejemplos es "Sibenik balada".




Breves pero interesantes presentaciones con información precisa y concreta que me ofrecen una visión global de la ciudad y del país. Muchas gracias a Antonija, Zeljka, Ines y Julija por trasmitirme vuestro conocimiento y hacerme partícipe de lo orgullosas que os sentís de vuestra escuela, de vuestro país y de vuestra ciudad, a pesar de los problemas. 

Clases con los grupos de 7A, 4A y 7B configuran el programa para la segunda mitad de la mañana. Ive, mi colega de Educación Física, ha comprado unas pelotas de espuma para jugar a Datchball; son algo pequeñas, pero nos apañamos. Aunque algo temerosos al principio por mi presencia y por no saber si conseguirían entenderme, unos juegos de calentamiento logran romper el hielo.  Les cuesta activarse, como adolescentes que son, pero una vez nos ponemos en faena, logro mantenerles enganchados y motivados durante toda la sesión hasta el punto de no querer parar de jugar. Los chicos demuestran buena actitud ante mis propuestas y buenas aptitudes motoras y coordinativas; no era nada sencillo atrapar esas pelotas tan pequeñas en el aire. Al grupo de 4A, más numeroso, no hace falta motivarles, ya vienen motivados de serie y con energía de sobra. Con este grupo me cuesta un poco mantener el control de la clase y hacerme entender; aun así, percibo que los juegos de calentamiento son de su agrado y que las actividades posteriores también. Todos los chicos llevan uniforme para hacer Educación Física, camiseta blanca y pantalón azul o mallas. Compruebo que, por lo general, el nivel de Inglés es muy bueno incluso en los grupos más pequeños, por lo que no tienen problema para entender mi mal Inglés. Termino muy satisfecho con las sesiones del día de hoy por haberles enseñado un juego que no conocían, por haber sabido hacerme entender en Inglés y por haber aprendido un nuevo juego de la mano de mi colega Ive. Estoy convencido que "Brother saved my life" gustará mucho a mis alumnos y cada vez que lo juguemos me hará recordar mi paso por Sibenik.




Finalizada la jornada, tras comer en el comedor escolar con Antonija, Ive me lleva a mi apartamento donde descanso un poco y me pongo a esbozar la entrada de hoy en el blog. He quedado con Zeljka e Ines a las 17:00 h para seguir conociendo más sitios emblemáticos de la ciudad. Primera parada, Drazen Petrovic. Un amante del baloncesto no puede marcharse de esta ciudad sin conocer el barrio, la cancha, la canasta, las zapatillas, los murales o la escultura en memoria del genio de Sibenik. Ines era pequeña y no vio jugar a Drazen, pero me cuenta que recuerda perfectamente el día que falleció pues conoció la noticia en el supermercado mientras acompañaba a su madre y todos allí lloraban incrédulos por lo sucedido. Al lado de la escultura y de la cancha que han construido en su honor, hay una cafetería llamada "Mozart" en honor al "Mozart del baloncesto" como era llamado.





Segunda parada, Fuerte de Barone, uno de los cuatro fuertes de Sibenik; el más bonito de todos a juicio de Zeljka. Una trabajadora del centro de interpretación del Fuerte nos da la bienvenida y nos explica de forma muy entusiasta la historia del reciento amurallado y cómo los habitantes de Sibenik hicieron frente al acoso de los turcos que nunca consiguieron conquistar la ciudad. Preciosas vistas desde donde se divisa la ciudad y toda la bahía. La luz, muy intensa a esa hora, no nos permite tomar fotografías de gran calidad, pero aun así, no me resisto a llevarme un trocito de Sibenik en mi teléfono. 





Última parada, centro de la ciudad. Para finalizar la tarde tomamos un café y un pastel en una de las mejores pastelerías de Sibenik. Por recomendación de Zeljka e Ines, pruebo un pastel icónico de la ciudad con forma de la Catedral de Santiago con una base de hojaldre y pistacho y un relleno de chocolate muy suave con frutos rojos, el cual merece la pena probar. Charlamos animadamente sobre nuestras familias, la escuela y, como no, sobre Erasmus, entre otros temas. Conversación distendida en muy grata compañía que sirve para poner fin a una intensa jornada llena de aprendizajes, experiencias y vivencias que no se olvidarán.  Muchas gracias Zeljka e Ines por vuestro tiempo y agradable compañía.



Erasmus en estado puro.

Espero todo bien por el cole.

Un abrazo desde Sibenik.